Alergias en motos. Consejos básicos

Son muchas las voces que avisan año tras año del peligro que supone conducir bajo los síntomas de estados alérgicos o de algunos de sus tratamientos con antihistamínicos. Si estas situaciones pueden ser realmente peligrosas en un coche, en el caso de los motoristas el cuidado debe ser máximo, debiéndose seguir unos sencillos consejos para que conducir una moto sea viable bajo esta dolencia.

Hay pocos estudios específicos sobre el efecto que ejerce la rinitis alérgica durante el uso de la moto, pero si nos fijamos en los síntomas más comunes de esta dolencia nos daremos cuenta del peligro existente.

Irritación de los ojos y lagrimeo; congestión nasal y estornudos; picores en piel, garganta y fosas nasales; problemas respiratorios, etc. a los que habría que sumar los producidos por algunos antihistamínicos como son la somnolencia y por tanto la falta de atención. 

En este sentido, la Dirección General de Tráfico ofrecía algunos datos cuanto menos inquietantes, como que estornudar cinco segundos seguidos conduciendo un coche a 90 Km/hora desviaba la atención de la carretera durante unos 125 metros, pasando a los 140 metros si la velocidad se aumentaba en 10 Km/hora. Imaginaros si a esto le sumamos que la conducción de una moto conlleva un alto grado de coordinación corporal que se ve afectada durante el estornudo... el tema es serio.

Ir al médico

El primer consejo que debe seguir cualquier motorista alérgico es ponerse en tratamiento lo antes posible, para lo cual deberá dirigirse siempre a un facultativo e indicarle que va a conducir habitualmente, de esta manera, siempre que sea posible la medicación suministrada utilizará principios activos como la bilastina, ebastina, desloratadina, loratadina y terfenadina que no tienen efectos secundarios en la conducción. Otro consejo importante si se va a emprender un viaje,es procurar haber iniciado el tratamiento dos o tres días para que el organismo se haya adaptado lo máximo posible a la ingesta de estos fármacos.

Casco integral

No debemos olvidar que la mejor forma de no sufrir los efectos de la alergia es estar lo más aislado posible del polen, para lo cual será imprescindible usar siempre un casco integral con su pantalla y todas sus entradas de aire cerradas. Además, si incorporamos una pantalla ahumada reduciremos el picor y el lagrimeo de los ojos. Tampoco debemos obviar la limpieza del interior del casco, hoy en día la mayoría de los cascos de gama medio-alta tienen sus interiores desmontables, con lo que su limpieza periódica no supone un gran esfuerzo.

Otros consejos

También existen otros consejos interesantes como son el uso de protector labial para evitar la sequedad y con ello el acto reflejo de humedecerlos con la lengua con lo que podríamos injerir polen; el acordarse de los ojos, utilizando como barrera física unas gafas de sol durante el día y transparentes si hay poca visibilidad; evitar circular a primera y última hora del día, ya que es cuando más concentración de polen suele haber; o incluso si es posible, el uso bajo el casco de una mascarilla para la boca y la nariz con filtro. Todos estos hábitos nos ayudarán a disfrutar de la moto incluso con alergia.

Fuente: https://www.motofan.com